Informe PISA 2012

13.12.2013 13:39

 

En este apartado vamos a comentar el nuevo informe PISA que ha salido hace poco tiempo, basándonos de datos concretos vamos a explicar todo lo que tiene relación con este informe.

 

Preguntas frecuentes sobre el informe PISA.

Cómo se hace y qué mide la prueba educativa más conocida del mundo.

 

¿Qué es?

Es una prueba que intenta medir, lo que los alumnos saben hacer con lo que han aprendido. Hay tres pruebas con resultados independientes: la competencia lectora, la matemática y la científica.

 

¿Quién lo hace?

La OCDE, en colaboración con los países participantes, lleva a cabo la prueba a la que se somete una muestra representativa de los alumnos de 15 años de cada país (en la última prueba han sido 65). Da igual que hayan repetido o no. Por ejemplo, en España un tercio de los alumnos que la han hecho en ocasiones anteriores están en 2º o 3º de ESO, en vez de 4º, el curso que les correspondería por edad. La muestra debe ser representativa en función del reparto de alumnos entre escuela pública y privada, la presencia de inmigrantes, etcétera. En cada país hacen la prueba entre 4.500 y 10.000 estudiantes. Si alguna región o comunidad de un país quiere tener datos propios, independientes de los generales de su Estado, debe ampliar la muestra de estudiantes que se evalúan. En España, año a año se han ido sumando comunidades y han participado en 2012 más de 25.000 alumnos, de tal manera que en el informe que ahora se presenta solo hay tres autonomías que no tendrán datos propios: Canarias, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana. Cada país o comunidad debe sufragar el coste de las pruebas.

 

¿Cómo se mide?

Las preguntas a las que se enfrentan los alumnos no son las clásicas de un examen en un instituto, precisamente porque intentan ver cómo se maneja la información más que cuánta información se tiene.

Cada una de las preguntas se someten a pruebas de fiabilidad (es decir, si una pregunta que se considera fácil es respondida mal sistemáticamente por alumnos con buenos resultados en general, es que algo falla) y hay algunas preguntas "ancla", similares en cada examen, que permiten comparar de forma fiable con pruebas anteriores.

Las dificultades de cada pregunta son importantes porque el objetivo es colocar a cada alumno dentro de un nivel de competencia.

 

¿Qué son los niveles de competencia?

Tomemos el ejemplo de la competencia matemática. En ella, se dividen las destrezas en tres dimensiones: procesos, contenidos, y contextos, según explica una entrada delblog del Instituto de Evaluación. Los que tienen el nivel 1 de matemáticas saben "responder a preguntas relacionadas con contextos que les son conocidos" y "son capaces de identificar la información y llevar a cabo procedimientos rutinarios siguiendo unas instrucciones directas en situaciones explícitas". En el otro extremo, los del nivel 6 "saben formar conceptos, generalizar y utilizar información basada en investigaciones y modelos de situaciones de problemas complejos, pueden relacionar diferentes fuentes de información y representaciones y traducirlas entre ellas de manera flexible y poseen un pensamiento y razonamiento matemático avanzado".

De igual manera se dividen el resto de destrezas, la lectora y la científica.

 

¿Cómo se leen los resultados?

El catedrático de Sociología Julio Carabaña explicaba hace tres años de la siguiente manera la puntuación de PISA: "La puntuación media de los países de la OCDE en PISA se establece por definición en 500, y la desviación típica en 100. Con esa métrica, diferencias de 10 y hasta 20 puntos son diferencias pequeñas". La puntuación media más alta de un país en lectura en 2009 fue de 556 (Shanghái), y la más baja, 314 (Kirguistán). España obtuvo 481. Estados Unidos, 500, y Francia, 496.

 

Adquirido de J. A. A. Madrid 2 DIC 2013 - 22:11 CET https://sociedad.elpais.com/sociedad/2010/11/28/actualidad/1290898801_850215.html

 

España repite curso

España está más o menos donde estaba hace una década, según los resultados de sus escolares de 15 años en matemáticas y lectura en el informe PISA de la OCDE (algo mejor en ciencias). Se puede decir, simplemente, que es muy difícil mejorar, y que desde luego eso inhabilita las interpretaciones catastrofistas sobre el empeoramiento del sistema español. Pero también puede ser para muchos frustrante ese estancamiento a pesar de todos los esfuerzos que se han hecho en educación, un tema que se considera crucial para el futuro del país.

 Desde 2003 los resultados en matemáticas de los alumnos se han mantenido estables dentro de su mediocridad. Una recta matemática, que se arqueó hacia abajo en lectura y que ahora se mejora hasta llegar al nivel de 2000. En PISA 2012 se consiguen en esta capacidad 488 puntos, 10 puntos menos que la media. Mientras que en los últimos seis años en ciencias han subido, aunque siguen quedando por debajo de la media OCDE.

“En matemáticas no estamos tan mal. En el grupo de Italia, Estados Unidos o Noruega que deberían supuestamente estar por encima”, cuenta Lorenzo Blanco, catedrático de Didáctica Matemática en la Universidad de Extremadura. “Y la media de la OCDE ha bajado seis puntos”.

¿A qué se debe este estancamiento? Educación incide en la rémora que suponen los repetidores. Un 34% de los chicos a esa edad va retrasado, casi el triple que la media. Sin ellos se alcanzarían los 519 puntos, superando los 506 de la OCDE. Pablo Zoido, analista principal del proyecto, estima que su retraso en conocimientos respecto a la media es de dos años y medio.

Monserrat Gomendio, secretaria de Estado de Educación, achacó en la presentación también estos malos datos al aumento de inmigrantes (tres veces más en una década, un 9,9%). “Un sistema educativo tan rígido no es capaz de lidiar con la diversidad en las aulas”, piensa Gomendio. Blanco sostiene que se debe a una “mala política” de integración de los extranjeros: “En España los resultados en matemáticas de los inmigrantes se mantienen estables, mientras que se ha reducido en 11 puntos en la media de la OCDE”.

Jorge Calero, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad de Barcelona, recuerda el lastre que supone el bajo nivel educativo las generaciones previas: “La reciente evaluación de competencias de la población adulta, también de la OCDE, es esclarecedora en este punto: España, junto con Italia, ocupa los puestos más bajos del ranking”.

Se acentúa el distanciamiento entre los resultados por género. Los chicos ganan en matemáticas (9 puntos más) y ciencias (7 puntos) y las chicas en lectura (29). A Blanco este dato le sorprende: “La tendencia siempre ha sido a reducirse la diferencia. En algunos países, como Islandia, las mujeres ya son mejores en matemáticas”.

Gomendio asegura que los resultados obtenidos no se asocian a una mayor inversión, pues el presupuesto ha crecido un 35% en una década (aunque será un 30% menor en 2014 que en 2010). “Lo que hay que cambiar son las normas de juego”. A partir de un gasto superior por alumno a los 36.600 euros —60.000 en España— Zoido subraya que la inversión no juega peso en los resultados. Pero sí la implicación y formación de sus docentes y la autonomía de los centros siempre que se rindan cuentas. Tampoco condiciona el sueldo de los docentes si este es mayor a 16.000 euros. “España tiene unos salarios por encima”, recuerda Gomendio, que propone “incentivar la promoción”.

Hasta ahora en España no había grandes diferencias entre los alumnos con escasos recursos económicos y los favorecidos. Pero en la actualidad dentro de los centros les separan 27 puntos cuando hace una década eran 18, aunque otros indicadores de igualdad se mantienen estables. Lo resalta Francisco Imbernón, catedrático de Pedagogía en Barcelona: “Nuestro sistema mejora el rendimiento de los más desfavorecidos, aunque es cierto que los de un mayor bienestar cultural tienen resultados más bajos. Se necesita un análisis más fino para entrever qué es lo que está pasando y no hacer lecturas sesgadas”. Gomendio remachó mucho los datos que considera argumentan la urgencia de una reforma educativa, aunque nazca sin apoyos. Como el alto número de horas de clases, que no se corresponde con los logros. Por eso motivo considera fundamental el cambio de la LOMCE que obliga a dedicar un 50% del horario lectivo las asignaturas instrumentales. Andalucía, a través de su consejero Luciano Alonso, acusó a Educación de “manipular y empeorar los resultados” para justificar la ley.

Blanco considera que habría que hacer como en Japón, donde se estudia la mitad de contenidos matemáticos. “Nuestros alumnos saben las fórmulas, pero tienen que saber interpretar, entender un gráfico o si es un timo la oferta del supermercado”.

Adquirido de: ELISA SILIÓ Madrid 3 DIC 2013 - 22:04 CET https://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/12/03/actualidad/1386063448_866928.html

 

 

A modo de resumen. Desde el inicio nos dicen que la educación sigue anclada y que está por debajo de la media.

MATEMÁTICAS

AÑO

PUNTOS

MEDIA OCDE 2012

2012

484 (+1)

494 (10 PUNTOS MENOS DE LA MEDIA)

2009

483

 

COMPRESIÓN LECTORA

AÑO

PUNTOS

MEDIA OCDE 2012

2012

488 (+7)

496 (8 PUNTOS MENOS DE LA MEDIA)

2009

481

 

 

CIENCIAS

AÑO

PUNTOS

MEDIA OCDE 2012

2012

496 (+8)

501 (5 PUNTOS MENOS DE LA MEDIA)

2009

488

 

·         Los orientales se encuentran en los primeros puestos.

·         Liechtenstein y Suiza son los que mejor posicionados están de los países europeos.

·         España está en el 33 puesto (de 65 países). Por debajo de Francia, Reino Unido y Portugal.

·         Hay una falta de equidad entre alumnos ricos y pobres,

·         Navarra, Castilla y León y la Rioja son las que tienen más puntos dentro de España.

·         Y los problemas más frecuentes es que: hay demasiados repetidores, mucho absentismo y falta de motivación en el profesorado.

·         Según el informe PISA 2012, nos queda mucho por hacer.

 

Primero de todo, tenemos que reconocer, aunque no nos guste, que muchas de las noticias (artículos, crónicas…) que salen del Informe Pisa ponen las cosas más negras de lo que son para así “intentar convencer” que la  LOGSE nos beneficiará a todos, dan algunos datos positivos pero la mayoría pone énfasis en los datos negativos: “Suspendemos en PISA”, es una de las cosas que más hemos escuchado desde hace unas semanas. Nadie dice, hemos aumentado 8 puntos en compresión lectora y en ciencias. Pues quizás se debería hablar de estas cosas para motivar a los alumnos, si son todas cosas negativas, los alumnos pensarán: “para que nos vamos a esforzar, si siempre lo hacemos mal”.

 

Otro punto en contra, ¿cómo nos va a ir bien si lo único que hacen los políticos es reducir el dinero dirigido hacia educación? En el artículo Suma peligrosa (https://elpais.com/elpais/2013/12/09/opinion/1386618435_223041.html) habla de este tema:

Mientras algunos indicadores permiten constatar que el ciclo económico está cambiando, los presupuestos del Ministerio de Educación y las diferentes comunidades autónomas para 2014 certifican nuevos recortes. Las Administraciones con competencias en enseñanza habrán reducido sus presupuestos en 7.298 millones de euros entre 2010 y 2014. Cuando se acaban de conocer los resultados del último Informe PISA, que registran un estancamiento en las pruebas de evaluación de competencias de los estudiantes, un informe sindical eleva hasta el 16,7% la merma de los presupuestos en lo que llevamos de crisis.

A esto hay que añadir la reducción aplicada por Educación en sus partidas. El conjunto del sistema tiene ahora un 35% menos de recursos que hace 10 años, mientras han aumentado las necesidades por el incremento del número de escolares. En las aulas hay ahora medio millón más de alumnos que en 2009 y por lo menos 20.000 docentes menos. Las consecuencias perdurarán durante años en uno de los facores más sensibles de competitividad de un país, el educativo.

La escasez presupuestaria impide incidir sobre las carencias ya identificadas como las principales causas de los mediocres resultados obtenidos en el Informe PISA. Con medidas, por ejemplo, que mejoren la calidad docente e incentiven la formación continuada del profesorado. O que sirvan para dotar adecuadamente los dispositivos de refuerzo de los alumnos con necesidades especiales. En los últimos años, el sistema educativo español ha recibido un importante contingente de niños extranjeros, muchos de los cuales con carencias de escolarización. En algunos casos ni siquiera conocían la lengua en que se impartían las clases, lo que hace bajar los promedios. La misma falta de recursos afecta a los alumnos con mayores capacidades. El Informe PISA indica que en España no se alcanzan los porcentajes de excelencia que serían esperables, lo cual significa que el sistema es incapaz de hacer aflorar potencialidades que podrían desarrollarse.

Es indudable que los objetivos de déficit deben ser respetados, pero también lo es que la educación necesita ser preservada porque de ella depende la futura capacidad productiva del país.

Otro problema es que dependiendo del partido político lo interpreta de una forma u otra, como dice Luis Miguel Santos Unamuno (https://elpais.com/elpais/2013/12/09/opinion/1386606812_978423.html):

“Todos, absolutamente todos, los han interpretado a favor de sus postulados. Para unos demuestran que la ley educativa recién aprobada es necesaria, o que más inversión no produce beneficios. Para otros que sigue pesando el gran analfabetismo de las generaciones de nuestros abuelos. Unas regiones sacan pecho por sus buenos resultados, mientras otras acusan de los malos al secular abandono o al centralismo que apenas les deja autonomía educativa e impide que desarrollen su, seguro, exitoso modelo”.

Este hombre explica que los hijos son a imagen y semejanza de los padres: “uno de cada cuatro de mis alumnos hace novillos, mientras los adultos de su entorno alargan sus bajas o trabajan en empleo sumergido. Otros copian en los exámenes como sus padres piden facturas sin IVA. Hay quien falsifica un boletín de notas que se parece mucho a la factura falsa de una mariscada cargada al dinero público. O menosprecian al alumno responsable, al que motejan de empollón, como el funcionario cumplidor es denostado por sus compañeros. La batalla contra el fracaso escolar se libra, paradójicamente, fuera de la escuela”.

En fin, lo que se debería hacer, es dar más dinero a educación, y sobre todo dejar que los profesores que están agotados de una profesión bastante dura se vayan a descansar y dar la posibilidad a nuevos profesores, con más entusiasmos y mejor preparados, ya que consideramos que los recursos que tenemos disponibles se podrían aprovechar muchísimo mejor. No tenemos tanta experiencia, pero es muy probable que tengamos más afinidad con los alumnos.